La Importancia del Color Amarillo en las Líneas de la Carretera: Un Elemento Clave para la Seguridad Vial
En el mundo de la seguridad vial, hay detalles que a menudo pasamos por alto, pero que juegan un papel crucial en la protección de todos los usuarios de las vías. Uno de esos detalles es el color amarillo de las líneas de la carretera. Aunque parece una simple convención estética, su uso está respaldado por razones muy prácticas y científicas que mejoran la seguridad en las carreteras.
¿Por qué se utiliza el color amarillo?
El color amarillo se emplea en las líneas de la carretera principalmente para marcar las zonas donde está prohibido adelantar. Esta distinción no es casual: el amarillo es un color que destaca mucho más que el blanco en diversas condiciones de visibilidad. Esto lo convierte en la opción ideal para señalar áreas de alto riesgo, como curvas peligrosas, zonas con poca visibilidad o intersecciones complejas.

Visibilidad y seguridad en condiciones adversas
El amarillo tiene la particularidad de ser más visible en condiciones de baja luminosidad, como la niebla, la lluvia o la noche. Esto se debe a que el amarillo es un color que refleja mejor la luz, lo que facilita su percepción por parte de los conductores. Además, cuando las condiciones climáticas empeoran y la visibilidad se reduce, las líneas amarillas son más fáciles de distinguir, lo que ayuda a los conductores a mantener el control de su posición en la carretera y a evitar maniobras peligrosas, como los adelantamientos en lugares inapropiados.